lunes, 29 de mayo de 2017

Como perros y gatas

La Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Oviedo, compuesta, como todo el mundo sabe, por un tripartito entre PSOE, Somos e IU, tras una fuerte y violenta discusión, entre estos amigos del alma, cancela la presentación de los presupuestos participativos. Esto lo hace un viernes por la tarde, el sábado, en uno de los periódicos de mayor tirada, el Alcalde se ufana de las “tensiones internas” del gobierno y la prensa difunde, con casi dos años de adelanto, las zancadillas, los encontronazos y los comentarios de los tres partidos posicionándose para las próximas elecciones. Incauto de mi, pensé que era el pueblo el objeto de su deseo y resulta ser el poder y el dinero.
 Foto La Nueva España
Luego están los desplantes públicos. A la Ascensión, van pero no se saludan. Se dan la espalda. Algunas decisiones del Consistorio o no se dicen o se hace en el último minuto. Por el bien del pueblo, me imagino.
Mas tarde vienen las discusiones políticas, tipo asamblearia, faceta que dominan. La Sra. Vicealcaldesa,piensa que el Congreso de Oftalmología,  es el lugar el lugar mas idóneo para litigar con sus oponentes políticos, y no la tribuna publica perfecta para encumbrar la ciudad de Oviedo.
Porque no iría con ella el alcalde, se pregunta este ciudadano de pie, ¿Por no verla en publico?, ¿Por no discutir?, ¿Por  no tener nada que decir? La realidad es que falto y se organizo otra gresca política.
Nuestros representantes municipales a lo suyo sin el pueblo que los eligió.
 Foto La Nueva España
Desde que llegue a Oviedo, en el verano de 1953, los profesores de los Maristas, colegio donde curse el bachillerato, nos inculcaban la conveniencia de leer, al menos un libro al trimestre y todos debíamos conocer las librerías de la capital. Así conocí Ojanguren, Santa Teresa, Cervantes y otras muchas. Hoy, cuando acabo de sacar los billetes para viajar a Madrid a recorrer, un año más, su Feria del Libro leo que la primera, con más de 160 años de existencia, cierra.
Lo lamento y confió que no sea un síntoma mas de la decadencia cultural en nuestra capital.
También la lectura, como parte de la cultura, es de derechas y por tanto también debe borrarse del mapa, pensara nuestro edil cultural del Tripartito que poco ha hecho y nada ha dicho sobre esta noticia funesta para el mundo literario.

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