Perros y visones

El manejo, tratamiento y comunicación de la pandemia esta, no solo, desacreditando a los expertos y políticos sino confundiendo completamente a la ciudadanía.
Si nos olvidamos momentáneamente del uso inicial de las mascarillas o la controversia entre espacios cerrados o abiertos, nos encontramos con la problemática del reino animal.
Hace apenas cinco años, Teresa Romero, enfermera auxiliar del Hospital Carlos III que se infectó de Ébola tras atender a un religioso que fue repatriado al contraer la enfermedad, solicitó a la Comunidad de Madrid 150.000 euros por los "daños morales" que le causó el sacrificio de su perro. Se adujo entonces que el animalito podía transmitir la enfermedad y se le sacrifico.

Perro

Al empezar a expandirse el coronavirus, allá por marzo, algún experto dictaminó que los visones eran transmisores del virus y se sacrificaron más de dos millones de animalitos. Siempre con el visto bueno de la autoridad sanitaria.
En aquellos días se razono que solo determinados animales: ratas, murciélagos y pocos más eran posibles transmisores, el resto no.
Como nuestros amados expertos cambian de opinión más que de dirección las veletas , resulta ahora que el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades de los Estados Unidos, publica que algunas mascotas — incluyendo perros y gatos — también se han infectado con el virus que causa la COVID-19. Esto ocurrió en su mayoría después de que los animales estuvieron en contacto cercano con personas infectadas con el virus de la COVID-19, y que en algunos casos ellos mismos fueron capaces de retransmitirla sobre todo a los niños pequeños, las personas con el sistema inmunitario debilitado, y las personas de 65 años y mayores que puedan estar en contacto con animales infectados.

Vison

Como está claro que en el caso de las mascotas caseras no es el mismo que el de los visones o el perro de la enfermera Romero, ya se están adecuando protocolos para proteger a las mascotas y organizando centros sanitarios para caso que enfermen.
Para proteger a tu mascota de la COVID-19 no permitas que tu perro o tu gato esté en contacto con personas o animales que no vivan en tu hogar.
Evita los parques para perros o lugares públicos en que se reúnan las personas y sus perros.
Cuando camines con el perro, asegúrate de ponerle una correa y de mantenerlo al menos a 2 metros de otras personas y otros animales.
Cuando sea posible, mantén los gatos adentro de tu casa.
Si te enfermas con la COVID-19 y tienes una mascota:
Aíslate de todos, incluso de la mascota. Si es posible, pídele a otra persona en tu hogar que cuide a tu mascota.
Evita acariciar a tu mascota, abrazarla, dejarla que te lama o te bese, y compartir tu comida o tu cama con la mascota.
Si cuidas de tu mascota o estás cerca de otros animales mientras estás enfermo, ponte una mascarilla de tela. Lávate las manos antes y después de tocar animales, su comida, sus desechos, y sus cosas. Asegúrate de limpiar los desechos del animal.
Sin duda nuestros responsables Sres. Illa y Simón tomaran rápidamente control de este tema, no sea que se les desmadre como en las residencias de ancianos, los lugares ocio nocturno o las reuniones familiares de más de seis personas.
Por favor, que el remedio no sea el exterminio de las mascotas.