viernes, 9 de octubre de 2020

Puta

Según https://es.wiktionary.org/wiki/puta: “Puta: Mujer que presta sus servicios sexuales por dinero. Entre los muchos seudónimos de la palabra se encuentran: Prostituta, ramera, cortesana, meretriz, buscona, fulana, furcia o pupila.
Corinna zu Sayn-Wittgenstein, más conocida como Corinna Larsen, es una empresaria alemana de origen danés que estuvo casada con el aristócrata alemán Casimir zu Sayn-Wittgenstein-Sayn.
De este ser, elija el lector el epíteto más apropiado de los escritos anteriormente, nunca podría decirse aquello de: “Yo soy la amante del Rey, la que reina por amor” (Magdalena. “La venganza de D. Mendo), ella no reino, pero por dinero, lo hizo todo. No lo digo yo, lo dice la meretriz danesa en todas las entrevistas dadas a la prensa y de las que sin duda obtuvo, también, pingues beneficios.

Corinna zu Sayn-Wittgenstein (El Jueves)
La tal Corinna no sé cómo sería en el sexo, de esto la buena mujer nunca habla cuando relata su vivencia con el Rey Emérito, pero como persona es, como decía un tío mío, es “Un mal bicho”.
Ni las peores busconas del barrio muerden la mano de quien tanto les ha dado. Ella sí, siempre por dinero, ridiculiza y airea sus defectos, que curioso, solo sus defectos, de quien la enriqueció y paseo por medio mundo. Lo hace con maldad y premeditación, dando la basura en entregas sucesivas, primero él, luego su mujer, sus hijos, su familia, todo lo saca a la prensa envuelto en un halo de candidez, como si fuese algo normal y no el trabajo de una ramera.
Es lamentable que especímenes como ella, que solo sirven para eso, anden alborotando los corrillos políticos que defienden la igualdad y que ignoran la prostitución como si tal cosa no existiese.
Como ella han existido antes un ejército, debe saber que el suyo es el oficio más viejo de la humanidad, pero de su catadura moral aparece una cada muchas décadas.

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